ABC Joaquín Herreros Robles, defensor del medio rural (PDF)

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Poco antes de Navidad me llamó Enrique Rodríguez Rendo, secretario general de las Escuelas Familiares Agrarias de Galicia, para darme la triste noticia de la muerte de Joaquín Herreros, Joaco, como le decíamos familiarmente.

Conocí a Joaquín en los años 70 del siglo pasado, cuando dediqué un tiempo a su lado en la inmensa aventura iniciada por él años antes de promoción del medio rural, de la formación de sus gentes con una metodología y enfoques innovadores y profundos.

Durante dos años, a bordo de su inolvidable Volkswagen escarabajo, recorrimos de cabo a rabo casi toda la Península Ibérica. Junto a él aprendí, además de estructuras y métodos de trabajo, su inmenso entusiasmo y convencimiento de la necesidad de promover y consolidar el proyecto.

En la década de los 60 Joaquín había iniciado en España la creación de las Escuelas Familiares Agrarias (EFAS), en las que adaptó el método de La Maison Familiale Rurale de Francia

Joaco tenía una personalidad rica y profunda. Era muy inteligente y un trabajador infatigable, de conversación amable y divertida, con un sutil y agudo sentido del humor capaz de romper cualquier tensión que se creara a su alrededor.

En la década de los 60 Joaquín había iniciado en España la creación de las Escuelas Familiares Agrarias (EFAS), en las que adaptó el método de La Maison Familiale Rurale de Francia, fantástica institución creada en 1935 y hoy con quinientos centros de promoción rural en el país vecino. En su pedagogía el alumno es el protagonista de su propia formación y actor de su proceso de crecimiento y desarrollo.

Joaco la consideraba excelente para promover a las personas ajena a todo paternalismo. Las familias constituyen el eje de su estructura, del proceso de formación de sus miembros y el centro de trasmisión reflexiva de sus necesidades y de sus líneas de formación y acción.

Joaquín era del Opus Dei y conoció personalmente al fundador, san Josemaría Escrivá. De él recibió y aprendió su afán por dedicar sus numerosos talentos y lo mejor de sus esfuerzos en favor de los demás, en especial en el mundo rural de entonces.

Joaquín era del Opus Dei y conoció personalmente al fundador, san Josemaría Escrivá. De él recibió y aprendió su afán por dedicar sus numerosos talentos y lo mejor de sus esfuerzos en favor de los demás, en especial en el mundo rural de entonces

Lector y escritor incansable, serio en su trabajo y en sus planteamientos, no exentos de una pizca de utopía y de pretender lo óptimo y lo inalcanzable, y que sabía inculcar en los que le rodeaban. Mostraba una exquisita sobriedad en todo lo referente a su persona.

A los pocos años de comenzar en España había creado más de treinta centros de formación EFA en el medio rural, con miles de alumnos y familias asociadas y comprometidas en la formación. Pero sus horizontes no se limitaron a las Escuelas Familiares Agrarias en España. Formó personas de muchos países de América para que ellos las promovieran y las impulsaran en sus países de origen, como Argentina, Perú, Chile, Uruguay, etc.

A los pocos años de comenzar en España había creado más de treinta centros de formación EFA en el medio rural, con miles de alumnos y familias asociadas y comprometidas en la formación

Posteriormente creó también el Instituto de Desarrollo Comunitario y un amplio conjunto de Centros de Animación Rural en gran parte de España. Profundo conocedor del medio rural de muchos países europeos, los visitó con frecuencia para aprender de sus soluciones, analizar iniciativas de interés y adaptarlas a nuestro país, en especial de Francia, por la que sentía gran afecto y admiración.

Recuerdo mis encuentros con Joaco en los últimos veranos en Cantabria, en las montañas de Reinosa, ya achacoso de cuerpo pero despierto de espíritu. Conversábamos largamente sobre sus escritos más recientes, que me entregaba para que los conociera y le diera mi opinión, sobre sus inquietudes y reflexiones que emergían de su dilatada sabiduría y experiencia de tantas instituciones, personas y países.

Me consta cómo le recuerdan y le aprecian miles de personas del medio rural español, en decenas de pueblos a los que alcanzó su impulso

Seguía siendo él, el mismo de siempre, entusiasta, profundo, amable, divertido, pleno de proyectos de futuro. Me consta cómo le recuerdan y le aprecian miles de personas del medio rural español, en decenas de pueblos a los que alcanzó su impulso. Tantos con los que compartió mesa y afanes y tantos en los que supo prender la llama de la esperanza de hacer las cosas mejor y del compromiso personal en el trabajo y el entorno vital.

José Pellicer, Secretario General de UNEFA hasta 1998